En una extensa y completa entrevista publicada en marzo de 2010 por el sitio CbaNoticias, el presidente de la Fundación Laura Cristina Ambrosio Battistel repasó la situación de emergencia vial en nuestro país y dio algunos datos sobre accidentología.

Pese a que ha pasado un tiempo, nos parece interesante reflotar lo que expresó Julio, para muchos nuestro “papá postizo”.

Julio Ambrosio es el Presidente de la Asociación de Familiares y Amigos Víctimas de Tránsito y coordina la Campaña Nacional de Concientización Vial Estrellas Amarillas. Desde la muerte de su hija Laura en un accidente vial, se propuso trabajar sin descanso para revertir esta situación. Crear conciencia en las nuevas generaciones e instar a los dirigentes a que reaccionen y actúen para que no existan más muertes en las rutas argentinas son sus objetivos fundamentales. Además, Ambrosio preside la Fundación Laura Cristina Ambrosio Battistel, cuya finalidad es promover la inclusión de los adultos mayores en la sociedad y brindarles una mejor calidad de vida, el anhelo de su hija.

Durante el 2009, murieron en Córdoba más de 520 personas víctimas de accidentes de tránsito, mientras que otras 566 quedaron imposibilitadas físicamente y 30.150 presentan lesiones parciales. De los 251.000 accidentados, 60.000 debieron ser internados. El panorama se vuelve más alarmante si tenemos en cuenta que la edad promedio de las personas muertas es de 26 años. “Esto me parte el corazón porque sé lo que es perder a una persona que tiene toda una vida por delante en hechos evitables, con un Estado que permanece ausente sin garantizar el derecho a la vida. Voy a defender la vida de los jóvenes como sea, son como mis hijos”, expresó Julio Ambrosio, Presidente de la Fundación Laura Cristina Ambrosio Battistel y de la Asociación Familiares y Amigos Víctimas de Tránsito.

La Fundación Laura Cristina Ambrosio Battistel nació el 20 de abril del año 2008 luego de que Laura Ambrosio, hija de Julio, muriera en un accidente de tránsito en la conocida “Ruta del Desierto”, rumbo a Bariloche, el 24 de mayo de 2006. La joven tenía 21 años, cursaba el tercer año de la carrera de Psicología en la UNC, era profesora de inglés, asistente terapéutica y sentía devoción por la tercera edad. Así es que su padre sintió la necesidad de que la Fundación también sea un espacio para brindar una mejor calidad de vida a los adultos mayores y concretar aquello que Laura soñaba.

En relación con el trabajo de la institución, Julio Ambrosio explicó: “Los abuelos y abuelas son los más desatendidos de la sociedad, hay que valorar su sabiduría, devolverles las ganas de vivir, reinsertarlos en la sociedad e inculcar el respeto y el cariño por los mayores sobre todo en los nietos”. La tarea se realiza en hogares de día y la idea es que, a través de talleres u otras actividades, los adultos mayores rememoren y compartan sus historias y vivencias o enseñen a los más chicos.

Estrellas amarillas, apostar a la vida

Por otra parte, el padre de Laura también coordina la Asociación Familiares y Amigos Víctimas de Tránsito desde la que se propone “luchar contra este flagelo con todas las fuerzas que tenga sin pedir ni dar tregua”. En ese sentido, el 20 de noviembre de 2008 se lanzó la Campaña Nacional de Concientización Vial Estrellas Amarillas “Sí a la vida” en Río Primero, primera localidad en declarar esta iniciativa de interés municipal. Hoy, ya se adhirieron más de 80 municipios de la provincia de Córdoba, distintas organizaciones y numerosas provincias argentinas como La Pampa, Buenos Aires, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Santa Fe, Neuquén, Río Negro y San Luis.

Cada estrella amarilla, pintada por familiares y amigos de la víctima en el lugar en el que ocurrió el accidente, pretende “llamar la atención para que otro no pase por esta experiencia, es necesario que comprendamos que allí se fue una vida inútilmente, ese es el verdadero sentido de la campaña”. Con esa idea, la asociación organiza actos en distintos lugares del interior provincial y el país y suma a la causa a padres, familiares y amigos que se identifican con la problemática. Esas personas crean grupos para trabajar activamente en la campaña y se comprometen a llevarla adelante en su zona.

Para Ambrosio, compartir el dolor con otras personas ayuda a mirar todo de una manera distinta, es sumarse e intentar transformar la tristeza y la angustia en amor, “es entender que hay que darle sentido a ese ser que se nos fue advirtiendo y ayudando a otros para que no atraviesen el mismo camino”. En ese sentido, los grupos colaboran desde sus pueblos y ciudades en la difusión de los objetivos de la campaña, organizan diferentes charlas en colegios y otros espacios para crear conciencia en los niños y adolescentes acerca de esta situación que nos involucra a todos y gestionan actividades con diversas instituciones.

Vale decir que en la creación de los dos espacios que coordina Ambrosio existe una idea que vincula el trabajo que se realiza en ambos y es el claro deseo de que las personas puedan gozar de todas las etapas de la vida; el entrevistado habla de “esas dos puntas del camino”, la niñez y la vejez, que todo ser humano tiene derecho a transitar. “Este trabajo lo hago con pasión porque quiero a los jóvenes y los quiero ver disfrutar la vida, no quiero más muertes”, enfatizó.

Convencido de que las generaciones de hoy comenzarán a tomar conciencia de la importancia de preservar la vida, Ambrosio aseguró: “Me consagré a esta lucha y no la voy a abandonar hasta que no les entregue la posta a los jóvenes”. De palabras sinceras, profundas convicciones sociales y una admirable fortaleza, Julio sostiene que “la juventud es maravillosa, a los adolescentes no hay que forzarlos, tenemos que seducirlos y motivarlos; yo les hablo mucho, desde mi papel de papá, invitándolos a que valoren y honren la vida”.

Emergencia vial: “Estamos perdiendo una persona y media por día”

Consultado sobre el accionar del Estado en materia de seguridad vial, el presidente de la Asociación Familiares y Amigos Víctimas de Tránsito opinó que estamos ante una desidia total a nivel gobierno y una clara falta de apreciación de la problemática por parte de los dirigentes. “No hay tiempo, estamos perdiendo una persona y media por día”, alertó Julio. Y añadió que México y Argentina son los países que encabezan las estadísticas de accidentes automovilísticos en el orden mundial mientras que Córdoba y Santa Fe, después de Buenos Aires, ocupan los primeros lugares a nivel nacional.

En cuanto al desempeño de la Policía Caminera, Ambrosio manifestó que se trata de “una policía estática, presente sólo en algunas rutas cordobesas”, cuyo objetivo sólo fue recaudar y no concientizar. Por otra parte, señaló que “la razón por la que la iniciativa no funcionó no se debe a que los funcionarios que están en las rutas hagan mal su trabajo sino a que los que dirigen no saben, lo mejor que pueden hacer es presentar su renuncia”.

Es necesario poner en marcha un proceso que debe comenzar por la concientización acerca de los riesgos del alcohol y las drogas, por ejemplo, para luego prevenir y después sancionar. La Justicia y el Poder Legislativo deben ponerse a tono con esto y actuar en consecuencia”, aseveró Julio. En este sentido, las medidas empleadas hasta ahora como la designación de la policía caminera o la implementación del carné por puntos son medidas que requieren de gran cantidad de recursos y no apuntan a solucionar el problema de raíz.

Julio, desde la coordinación de la Campaña Nacional Estrellas Amarillas, asegura que estamos en emergencia vial y que “el gobierno nacional tendría que atender a esto y exigir, además, que las provincias adhieran a la Ley nacional de Seguridad Vial”.
Próximos actos de la Campaña Nacional de Concientización Vial “Sí a la vida”
13 de marzo – Adelia María, 18 horas / Plaza Domingo Faustino Sarmiento
10 de abril – Mendiolaza

Nota: http://www.cbanoticias.net/ Por Malena Muñiz