El sábado pasado se realizó un acto en el cual la Municipalidad de Bell Ville firmó el acta adhiriendo a la Campaña Nacional de Concientización Vial “Sí a la Vida!” de la Fundación Laura Cristina Ambrosio Battistel.

Tal como confirmaron fuentes del Ejecutivo municipal, el acto fue presidido por la intendente María del Carmen Ceballos de Carbonetti, quien estuvo acompañada de sus funcionarios y representantes de distintas instituciones de la ciudad, como así también del titular de la Fundación, Julio Ambrosio, familiares de fallecidos en accidentes viales de distintos puntos de la Provincia, y referentes de las Iglesias católica y Evangélica.

En este marco, Julito aseguró: “La indiferencia es el mayor problema que se presenta para luchar contra este flagelo porque nadie tiene un certificado de garantía de que esto no nos va a pasar, tenemos que despertar y tomar conciencia todos, esto no es una responsabilidad únicamente del Estado, somos los ciudadanos, junto con el Estado, responsables de esta situación”.

 

Y agregó: “Muchas veces los padres nos equivocamos cuando creemos que decir un no va a ofender a un hijo, y a veces un no bien dicho es un acto de amor y de defensa de la vida”.

Durante el acto, el pastor de la iglesia Evangelista Alfredo Ré y el Cura Párroco Guillermo Prino ofrecieron una bendición a las víctimas de los accidentes, a la vez que la Sra. Lucía Gigena leyó una poesía en memoria de su hijo Damian, fallecido en un accidente de tránsito en Villa María.

En representación del municipio hizo uso de la palabra el Secretario de Seguridad, Juan Pablo Quirinalli y luego se dirigió a los presentes el Sr. Julio Ambrosio en representación de la Fundación Laura Cristina Ambrosio de Battistel.

Quirinalli dijo, entre otros conceptos que “desde el Municipio, con la creación de la Secretaría de Seguridad, se asumió el compromiso de combatir este flagelo que aquí, en nuestra ciudad, cobró una significativa cantidad de vidas”.

El mayor problema es, dijo Quirinalli, la no toma de conciencia, creer que no es un problema nuestro.