El 20 de abril de 2008 creamos la Fundación Laura Cristina Ambrosio Battistel con dos claros objetivos: cuidar de la tercera edad y hacer la concientización vial. La primera puesto que mi hija amaba a los abuelos, y la segunda, porque Laura falleció en un hecho de tránsito.

Así, nos pusimos a trabajar, acompañados por un puñado de amigos. En octubre de ese año, por intermedio de Estela Mazzoni de Río Primero, me contacté con el municipio de de esa ciudad y se concretó una audiencia con su intendente, Guillermo Crucianelli. En esa charla, que se prolongó por más de una hora, le solicité que declarara la Campaña de Concientización Vial Estrellas Amarillas de interés municipal y que la lanzáramos allí.

A los pocos días, el Honorable Concejo Deliberante declaró, por unanimidad, de interés municipal a la Fundación y a la Campaña. Así, el 29 de noviembre de 2008 se realizó un emotivo acto de lanzamiento ante una multitud. Habíamos dado el primer paso.

La Campaña estaba en marcha y su futuro era incierto, lo único seguro era mi profunda convicción de luchar sin descanso contra este enemigo social. Así llegó el acto de Jesús María, segunda localidad en declarar la Campaña de interés municipal.

Más tarde, estuvimos en el Festival de Jesús María y las consignas de valorar la vida y tomar conciencia traspasaron los límites de la provincia de Córdoba y comenzaron a expandirse hacia otras. No importaba la distancia, necesitaba estar junto a la gente y despertar las conciencias.

En consecuencia, se realizaron numerosas actividades desde la Fundación para impulsar la Campaña Estrellas Amarillas a lo largo y ancho del país; muchos fueron los caminos recorridos hasta conformar la gran familia de la Fundación. Una familia construida con amor, esfuerzo, y entrega. Es oportuno recordar a los innumerables amigos y amigas que me permitieron entrar en sus corazones, no tengo cómo agradecer tantas muestras de cariño durante estos tres años.

Yo albergaba un sueño que la sociedad, especialmente la juventud, se sintieran atraídos por la Campaña, que tocara sus corazones y se convirtieran en soldados de esta lucha y, de a poco, se fue logrando. Se sumaron jóvenes de todo el país y hoy son miles los que marchan y luchan junto a la Fundación y la Campaña.

Sin embargo, necesitábamos una herramienta más para profundizar la difusión de las ideas de concientización vial, el respeto a la vida y poder generar un mayor compromiso social en relación al tema. Además, es imprescindible, dada la magnitud del fenómeno, reconocer y visibilizar la tarea que realizan, día a día, los distintos grupos de Estrellas Amarillas en cada rincón de Argentina.

Por esto mismo nació Estrellas Amarillas – a diario, un espacio para dar a conocer actividades que se llevan a cabo en todas las localidades, compartir las inquietudes que a todos nos surgen, apoyarnos y conocernos aún más. Se trata de un medio de comunicación pensado para que, entre todos, podamos terminar con el flagelo de los hechos de tránsito en las rutas argentinas.

Yo sólo tuve la idea, pero ustedes lo hicieron posible y, por eso, quiero agradecerles de corazón a todas las personas que, en estos tres años, me brindaron su cariño, su apoyo y me permitieron entrar en sus corazones al igual que ellas ingresaron en el mío. De ese modo, pudimos construir entre todos y todas, con amor, esfuerzo y sacrificio, esta gran familia de la Fundación Laura Cristina Ambrosio Battistel a lo largo y ancho del país.

Julio Ambrosio